Cartera vencida y abusos legales

Probablemente usted sea uno de los más de dos millones de tarjetahabientes que ya son considerados como “morosos, de los 26 millones de tarjetahabientes que hay en México”.

La semana pasada, un alto funcionario de uno de los bancos extranjeros que han encontrado en México las condiciones para ser más rentables que en otros, incluso más que en sus países de origen, declaró:

La morosidad de los tarjetahabientes ya es de casi aproximadamente el 8%, y la tendencia es este porcentaje seguirá subiendo. Por ello, dijo, los bancos se verán obligados a recurrir a la vía judicial para poder recuperar lo que prestaron.

Pero no se alarme: el mismo funcionario agregó que “por ser deudas de carácter civil, los deudores no deben preocuparse porque no pueden ser encarcelados”. Quizá lo menos que se espera de usted es que remita una carta a su banco para agradecerle que no esté pensando en enviarlo a prisión.

Lo cierto es que en este país ninguna autoridad que tenga que ver con los bancos mueve un solo dedo a favor de un deudor o, mejor dicho, de los incautos que oyeron el canto de las sirenas (sin comprobar ingresos, sin engorrosos trámites, reciba la mejor tarjeta, la que más beneficios le ofrece y con la que usted podrá tener el estilo de vida que siempre ha deseado) y que por quién sabe qué caminos llegaron a creer que el paraíso consiste en tener muchas tarjetas, comprar ahora y pagar... a ver cuándo.

La Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios de las Instituciones Financieras (Condusef) es una instancia útil y necesaria desde el punto de vista informativo, pero no tiene ninguna facultad para poder ayudar verdaderamente a un deudor.

Únicamente cumple con su compromiso de informar de manera documentada y de advertir a los deudores sobre los riesgos.
Datos de esa institución revelan que el 60% de los tarjetahabientes acostumbra pagar sólo el mínimo requerido por el banco. Mala práctica ésta, pues la propia Condusef ofrece el siguiente ejemplo: si usted realizó una compra por 10 mil pesos y cada mes paga sólo el mínimo —suponiendo una tasa de interés del 28%, inferior a la que están cobrando los bancos— transcurridos 20 años su deuda superará los 75 mil pesos.

Si seis de cada 10 tarjetahabientes están pagando sólo el mínimo, no es difícil imaginar el problema que se avecina. Me atrevo a afirmar que lo que están recibiendo de los que pagan el mínimo, es más que el crédito que le otorgaron a los 26 millones de tarjetahabientes.

Las tasas que los tarjetahabientes pagamos al banco oscilan entre 30%, la más barata, y 113.40%, la más cara. Debo recordar aquí que no se trata sólo de intereses sobre el monto de la deuda original, sino que estos intereses se cobran también sobre intereses. Este abuso, perdón, este esquema financiero se llama anatosismo, y ha sido avalado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación desde 1997, cuando dictó nueve jurisprudencias al respecto. Agiotismo legalizado.

Según datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), “en los últimos seis años, las ganancias de las instituciones de crédito comercial más grandes del país crecieron 315.9% en términos reales”. Otro dato más: las ganancias que obtuvo el grupo español BBVA en México, a través de Bancomer, ascendieron al 29% de sus utilidades globales en 2007.

Esto quiere decir que México aporta mayores utilidades que todas las sucursales que este banco tiene en el mundo, incluyendo España.

En el caso de Banamex, aporta el 50% de las utilidades globales de Citibank.

Somos, pues, nosotros, con tanta pobreza en el país, los clientes que más utilidades aportamos a los bancos... extranjeros.

En diversos países de América Latina existen leyes sobre las tarjetas de crédito enfocadas a proteger a los usuarios. En México no tenemos nada.

Pareciera que en el gobierno federal nadie tiene la capacidad de realizar el más somero análisis de la situación real de los problemas económicos, políticos y sociales, que sí se pueden evitar, a partir de información, de voluntad política y, sobre todo, de acciones oportunas.

¿Por qué los bancos están invitando a los tarjetahabientes de otros bancos para que recurran a ellos y puedan pagar sus deudas con tasas no mayores a 23% a tasa fija y hasta 36 mensualidades?
Lo lógico sería que los mismos bancos ayudaran a sus propios clientes morosos y les ofrecieran esquemas más razonables de pago, en lugar de “preocuparse” por los deudores de otros bancos y aprovecharse de la situación para engordar su cartera.

¿No habrá un solo funcionarios del gobierno federal al que se le ocurra “obligar” a los bancos a hacer con sus clientes lo que les están ofreciendo a los de otros y evitarse problemas?

Como México no hay dos, dice el romántico lema. Por eso todos los bancos quieren estar aquí... [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]

...claro aqui tienen a sus serviles gatos del gobierno y a un pueblo que aun se honra de complir sus compromisos que a pesar de estas tasas usureras y condiciones bestiales solo lega al 8% de morsidad, mas aun el 60% le da de tragar hasta 7 veces lo que presto el banco.

Dice el mismisimo Presidente de la CNB, que las ALTISIMAS Tasas que nos cobran los Bancos aquí en México, son por el riesgo de la NO recuperación que existe, es decir el riesgo de no recuperar lo préstado es ALTO, por lo que en la tasa que nos cobran ya va incluido el importe que nos estan prestando por si acaso no logran recuperarlo... [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen] , además a eso agreguenle lo comentado sobre pagar solo el mínimo, lo que equivale a tener la DEUDA ETERNA y permanecer cautivo de ellos.. todo esto por supuesto avalado por nuestro queridisimo y gran Gobierno... [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen] ....

Les sugiero que VEAN este filme, esta en el sitio y nos permite echarle una ojeada a los pensamientos de los dueños del dinero, es brutal lo que dicen a nuestras espaldas.

Ya tiene que lo postee pero considero oportuno por este post, recordarselos.


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